PROTÉGETE CONTRA LAS TORMENTAS DE PENSAMIENTOS: LA ESFERA MENTAL.

Aunque las palabras puedan parecer muy similares, nada tiene que ver una “lluvia de ideas” con una “tormenta de pensamientos”. Nada más alejadas en cuanto a utilidad para la persona que las está viviendo. La primera es algo que elegimos hacer para dar con la mejor solución a un problema. Se trata de tener, individualmente […]

Aunque las palabras puedan parecer muy similares, nada tiene que ver una “lluvia de ideas” con una “tormenta de pensamientos”. Nada más alejadas en cuanto a utilidad para la persona que las está viviendo.

La primera es algo que elegimos hacer para dar con la mejor solución a un problema. Se trata de tener, individualmente o en grupo, muchos pensamientos de manera intencionada para obtener entre todos ellos el más indicado ante una determinada situación. Es algo buscado y controlado. Llueve en nuestra mente, pero digamos que es una lluvia provocada y placentera.

La segunda puede llegar a ser la tormenta perfecta; con rayos, truenos, gota fría y tres huracanes por en medio. No es deseada en absoluto y nos hace sentir todo tipo de emociones negativas que nos crean estados de ansiedad, miedo, desesperación… Es cuando nuestra mente no puede parar de pensar, nos bombardea con pensamientos sobre una determinada situación, persona o problema y como no nos da un respiro, al final nos ahoga y podemos llegar a estado emocionalmente muy perjudiciales.

Hoy he dado un largo paseo. De hecho, últimamente doy muchos. Y no los disfruto plenamente porque, aunque haga un tiempo estupendo, en mi mente esa tormenta está siendo demasiado habitual. Hoy he dicho BASTA. Y ha venido a mi mente instantáneamente este ejercicio que comparto con vosotros. Lo he puesto en práctica y puedo decir que funciona. A mi me ha funcionado y sé que seguirá haciéndolo. Os lo explico:

 

-Imaginad una esfera de luz blanca y luminosa. Imaginad una esfera perfecta. Podéis imaginarla sólida o bien hecha de pura energía. Lo que sí debéis tener es la seguridad de que es indestructible. Nada en el universo podría dañarla. Está hecha del material más resistente y perfecto de toda la creación. Por dentro está hueca. Está totalmente vacía. Y ese espacio donde no hay nada hace que todavía sea más perfecta. Es un espacio vacío de todo. Es un espacio sagrado donde solo hay calma y paz. Nada más.

Ponedle un nombre. A mi me vino la palabra “Santuario”, pero hay mil nombres posibles y cada uno vais a buscar el que os parezca mejor: Hogar, Paz, Refugio, Mente en Blanco, Tranquilidad, Fortaleza, Tesoro, Serenidad, Amor, Libertad… La lista podría ser infinita.

-Ahora situadla, con vuestra imaginación, en el espacio que realmente ocupa vuestro cerebro. También podríais situarla un poco más arriba o flotando sobre vuestras cabezas. Colocadla donde creáis que vuestros pensamientos tienen lugar. A partir de ahora siempre ocupará dicho espacio.

-A partir de ahora vuestra misión es mantener esa esfera blanca y luminosa libre de todo pensamiento. ¿Cómo lo hacemos? Visualizadla y sentidla. Sentid ese espacio vacío de su interior pues ese vacío protegido os va a traer segundos, minutos y después periodos de PAZ mental.

-Al principio sí van a haber pensamientos que se cuelen en este lugar sagrado. Esto es normal. Os va a pasar muchas veces. Pero lo único que vais a hacer es imaginar que esa esfera se limpia inmediatamente de dicho pensamiento intruso. Tiene ese superpoder y lo hace eficaz e instantáneamente. Personalmente yo visualizo, cuando penetra algún pensamiento, como mi esfera brilla con mucha intensidad deshaciendo en el acto cualquier pensamiento indeseado. Podéis imaginar también que vuestra esfera gira a una velocidad tremenda y lo expulsa o cualquier cosa que os venga a la mente.

Y seguís visualizando y conectando con esa esfera tan perfecta y vacía. Aunque sepáis que tiene un poder infinito, a la

 par, os va a seguir dando calma. Porque tener, aunque sea unos instantes, la mente libre de pensamientos indeseados es imprescindible para que determinadas circunstancias no puedan con nosotros.

Es un ejercicio perfecto para hacerlo sentados, acostados o, bien como yo, en movimiento mientras hacéis otra cosa. Es perfecto para cuando vuestra mente se vea bombardeada por miles de pensamientos dañinos. Cuanto más tiempo mantengáis vuestra esfera vacía y la visualicéis, más poder le vais a dar. Por ende, más fortaleza mental para vosotros y más control sobre los rayos y truenos que son, en ocasiones, nuestros propios pensamientos.

Deseo mucha paz mental para todo el planeta. Falta hace.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Información básica sobre protección de datos Ver más

  • Responsable: Pedro Molera.
  • Finalidad:  Moderar los comentarios.
  • Legitimación:  Por consentimiento del interesado.
  • Destinatarios y encargados de tratamiento:  No se ceden o comunican datos a terceros para prestar este servicio. El Titular ha contratado los servicios de alojamiento web a Banahosting que actúa como encargado de tratamiento.
  • Derechos: Acceder, rectificar y suprimir los datos.
  • Información Adicional: Puede consultar la información detallada en la Política de Privacidad.

Scroll al inicio
Esta web utiliza cookies propias y de terceros para su correcto funcionamiento y para fines analíticos y para mostrarte publicidad relacionada con sus preferencias en base a un perfil elaborado a partir de tus hábitos de navegación. Contiene enlaces a sitios web de terceros con políticas de privacidad ajenas que podrás aceptar o no cuando accedas a ellos. Al hacer clic en el botón Aceptar, acepta el uso de estas tecnologías y el procesamiento de tus datos para estos propósitos. Más información
Privacidad